La comunidad se despierta con "la Chachis" a las seis de la mañana todos los dÃas. Su ritual diario consiste en levantarse, tomarse un café, barrer y asear el piso comunal de la residencia que renta. Alrededor de las siete de la mañana se puede oler el desayuno que le proporciona a las diversas personas que la visitan en el dÃa: parientes, amigos o simplemente conocidos de la comunidad de Santa Catarina, Querétaro.
La casa se convierte en un centro comunal informal desde que abre la puerta, con la Chachis como matrona y figura central de la comunidad. Ha vivido en la misma comunidad desde que nació: se educó, trabajó, y tuvo una familia en las seis cuadras que lo conforman. Si bien ahora la zona sufre de crimen seguidamente, la Chachis es una institución comunitaria que es respetada por los maleantes.
"Por aquà asaltan mucho, pero me conocen y si saben que estas conmigo, te dejan en paz."
A sus 66 años se dedica exclusivamente a la renta y mantenimiento de cuartos medianos, pero ha trabajado en el campo, en el tianguis, incluso en una feria la cual le tomaba cuatro horas diarias ida y vuelta. Ahora que se ha asentado en la casa 3B se ha encargado de una manera u otra de las familias fragmentadas que viven en Santa Catarina. Jóvenes que trabajan turno completo con esposos en el Norte le encargan los niños cuando no tienen a quien recurrir. La Chachis invita a su casa a comer a cualquier miembro de la comunidad que nada más no le alcanzó esta vez para comprar.
Estricta pero justa, no le extiende sus favores a viciosos ni criminales. Sin embargo, a muchos de estos jóvenes los conoce desde que nacieron y les extiende la mano cuando realmente buscan cambiar. La fiestas en casa de la Chachis duran todo el dia, desde temprano que invita a un caldo de mariscos con cerveza y tequila y plática sabrosa, hasta la noche cuando amenizan con karaoke cualquiera que le quiera entrar a la carne asada. La Chachis es el pilar central de la comunidad de Santa Catarina: más que miembro de la comunidad, ella es la comunidad misma.